Vecinos de Ancud solicitan mayor seguridad en calle Dieciocho y Prat

Un ambiente hostil con episodios de inusitada violencia se ha instalado a lo largo de calle Dieciocho caracterizada por el funcionamiento de restaurantes, Mercado Municipal y establecimientos comerciales.

El último hecho fue protagonizado entre dos hombres con el uso de un arma blanca a plena luz del día frente a decenas de testigos que circulaban por esta arteria.

Un fenómeno de agresividad asociado a la presencia de los llamados “captadores” de clientes donde entran en escena chilenos y migrantes generando una verdadera disputa.

Así lo planteó el comerciante, Cristian Komaptzki, quien cuenta con una carnicería a escasos metros desde donde se produjo la gresca.

"Se disputan como una presa a los posibles comensales, extranjeros en mayor cantidad, y allí vienen los problemas, va discutiendo entre ellos, van subiendo la voz y aquí hubo realmente una batalla campal entre los captadores de una y los captadores de otra", contó Kompatzki quien ha sido víctima de robo a su propiedad.

El comerciante dijo que el otro hecho tuvo lugar a principios de esta semana "con guardias de la municipalidad heridos y ya colmó, esto continúa".

Este fenómeno motivó a los locatarios a reunirse este jueves con autoridades municipales para visibilizar su preocupación junto con solicitar una mayor intervención para frenar los conflictos que protagonizan migrantes y trabajadores locales.

Materia que tuvo eco en el encargado de la Dirección de Seguridad Pública de la Municipalidad, Iván Ulloa, al prestar atención a esta problemática y los caminos de solución para restablecer la tranquilidad en este barrio.

"El hecho que nos tiene ocupados y preocupados es el tema de las vocerías, no deberían existir ya que hay problemas entre ellos mismos, se va a tratar de fiscalizar o minimizarlo según lo que manifestó el alcalde", señaló Ulloa.

El funcionario dijo que se ha instalado una cultura distinta en alusión a los enfrentamientos o disputas por los clientes, siendo un patrón de conducta que no es propia de la comunidad.

Sobre este punto dijo que "la verdad que quienes somos de acá, no había visto este tipo de vocería, en algunas otras partes sí , la gente que ha viajado puede decirlo , pero acá no es algo cultural".