Es así como durante estos días, los funcionarios han inspeccionado que se cumpla con la trazabilidad de la carne comercializada y que estos establecimientos además cumplan con todo el reglamento sanitario correspondiente para la venta de carne y sus derivados.

Al respecto, la jefa de la oficina provincial de la Seremi de salud en Chiloé, Marcela Zapata, señaló que “desde la semana pasada ya hemos realizado distintas fiscalizaciones, donde varios locales han tenido inicio de sumarios sanitarios asociados a inocuidad de los alimentos y la mala trazabilidad de las carnes, es decir sin procedencia comprobable”.

La autoridad de salud provincial informó que a la fecha se han desarrollado 32 fiscalizaciones, cuatro corresponden a supermercados, de los cuales a uno se le inició un sumario sanitario; 16 carnicerías, de los cuales cuatro están con inicio de sumario; y 12 fábricas de empanadas, donde tres de ellas también están con inicio de sumario sanitario. Producto de estas fiscalizaciones, a la fecha se han decomisado 114 kilos de productos cárnicos con características organolépticas alteradas y productos vencidos.

Marcela Zapata hizo un llamado a las familias chilotas “a cuidarnos y cuidar a nuestras familias, respetando además las medidas de prevención de covid cuando asistamos a recintos con gran afluencia de público”.

En tato, el jefe provincial del SAG, Miguel López, explicó que “permanentemente se está fiscalizando carnicerías y supermercados, pero sin dudas durante estas fechas se incrementa la fiscalización, ya que aumenta el consumo de carne y a nosotros lo que nos interesa es que en la cadena completa -que se inicia desde el agricultor y llega hasta el consumidor final- se mantenga la inocuidad, es decir que la carne pase por un matadero y que cuente con todos los respaldos que acrediten la procedencia de esa carne y también hacemos un llamado a cumplir con toda la documentación exigida.”

Ambas autoridades recalcaron el llamado a la ciudadanía al autocuidado en el consumo de los alimentos típicos en estas Fiestas Patrias, con énfasis en comprar y consumir siempre en lugares autorizados, ya que las carnes faenadas y comercializadas de forma clandestina no aseguran su inocuidad, lo que significa innumerables riesgos para la salud de los consumidores, pues se desconoce el estado sanitario del animal, o si el animal estaba bajo algún tratamiento veterinario que restringe la posibilidad de consumo de su carne.​