El Mandatario destacó el compromiso del Gobierno de Chile con el respeto y la protección de los migrantes y enfatizó que el país tiene una política firme y clara en esta materia, que apunta a una migración ordenada, segura y regular.

El Presidente Sebastián Piñera defendió este lunes la decisión del Gobierno de Chile de no sumarse al Pacto Mundial para la Migración de Marrakech y resaltó las acciones adoptadas por su administración para promover una migración ordenada y regular.

El Mandatario enfatizó que Chile reconoce la importancia de la colaboración a nivel internacional y que ha suscrito diversos tratados en migración y Derechos Humanos que cumple y respeta.

Además, destacó que el país ya posee una política migratoria “abierta a todos aquellos que vienen a Chile a iniciar una nueva y mejor vida, respetando nuestras leyes, integrándose a nuestra sociedad y aportando al desarrollo de nuestro país”. Sin embargo, resaltó la necesidad de una migración ordenada, segura y regular que cierre las puertas a quienes buscan causar daño o cometer delitos.

“El Pacto de Migración de Marrakech contradice algunos de los principios y objetivos de nuestra política de migración”, dijo el Mandatario en una declaración en el Palacio de La Moneda.

“Si bien el Pacto de Marrakech no es legalmente vinculante, sus objetivos, su contenido, incentivan la migración irregular, establecen nuevos deberes para el Estado de Chile, restringen nuestra soberanía y pueden perjudicar a nuestro país en eventuales juicios internacionales”, dijo el Presidente.

El Mandatario destacó que la iniciativa dificulta el proceso actual de ordenamiento y regularización migratoria que lleva adelante Chile. “Por esa razón, ejerciendo mis atribuciones como Presidente de la República, y teniendo como único norte el interés, el bienestar y la calidad de vida de todos mis compatriotas, tomé la decisión de no adoptar el Pacto de Marrakech”, concluyó.

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