Anoche, al último debate presidencial emitido por la cadena Globo, solo asistieron siete de los 13 candidatos en disputa. Y el gran ausente fue quien lidera en las encuestas: el ultraderechista Jair Bolsonaro. El abanderado del Partido Social Liberal (PSL) no asistió por recomendación médica. Aún convaleciente del apuñalamiento que sufrió el mes pasado en Minas Gerais, el excapitán de Ejército no había tolerado más de dos horas de pie, según sus doctores.

Pero Bolsonaro, que en los últimos días muestra una tendencia al alza en las encuestas, no podía dejar pasar la oportunidad de acaparar las miradas. A la misma hora del debate se las arregló para que el canal Record TV transmitiera su primera entrevista en exclusiva desde que recibió el alta médica, el sábado pasado. Durante la emisión de 25 minutos, que fue interrumpida tres veces por un enfermero, Bolsonaro calificó a su principal, el candidato del PT Fernando Haddad, de “títere” del expresidente Lula, al tiempo que afirmó que no tiene control sobre las fake news eventualmente propagadas por sus seguidores. También aseguró que respetará el resultado de las elecciones.

Resultados que, según las últimas encuestas, serían favorables para Bolsonaro en primera vuelta. Ello, porque el alza del candidato del PSL se aceleró en los últimos días. Según el último sondeo de Datafolha, el diputado ultraderechista tiene un 35% de intención de voto contra el 22% de Haddad. Si se considera solo los votos válidos, la relación es de 39% a 25%. Sólo esta semana, según destaca Helio Gurovitz, columnista del portal G1 de Globo, ganó seis puntos en votos válidos tanto en el sondeo de Ibope como en el de Datafolha. Esto corresponde aproximadamente a 6,7 millones de votos si se considera un nivel de abstención, votos nulos y blancos similares al de la última elección.

Según Gurovitz, si se intensifica el ritmo de ascenso, de modo que Bolsonaro consiga reunir el mismo número de votos hasta el domingo, podrá llegar a las urnas con 49,2 millones de votos, esto es cerca del 46% de los votos válidos. A pesar de ello, el columnista de G1 cree que “lo más probable, hoy, sigue siendo una segunda vuelta entre Haddad y Bolsonaro”.

Una opinión similar expresa Márcia Cavallari, CEO de Ibope. En una entrevista publicada hoy por el diario O Estado de Sao Paulo, afirma que la probabilidad que la elección se resuelva en la primera vuelta “es baja, pero no imposible”. “Bolsonaro tendría que crecer mucho y en pocos días en Brasil entero”, comentó. En todo caso, Cavallari tiene claro lo que se viene después de las elecciones del domingo. “Es importante decir que la segunda vuelta es nueva elección y comienza desde cero. Muchas cosas influyen como el resultado de la primera vuelta y la coalición de fuerzas políticas en torno a los candidatos”, concluyó.